sábado, 30 de agosto de 2014

Lo que hay que aprender de Eliot

"Lo que hay que aprender de Eliot es la naturaleza de doble filo de la realidad poética: después de un primer encuentro con la poesía como un extraño hecho de la cultura, al paso de los años se logra interiorizarla hasta que se vuelve, como dicen por ahí, una segunda y arraigada naturaleza. Una poesía que originalmente lo rebasa a uno, generando la necesidad de comprender y superar su rareza, al final se vuelve un sendero familiar por dentro, una disposición gracias a la cual la imaginación se abre placenteramente, volviendo la vista hacia los orígenes y la soledad. Este último estado es, por lo tanto, mil veces mejor que el primero, pues la experiencia de la poesía verdaderamente se ahonda y fortalece al revalorarse. Ahora sé, por ejemplo, que me fascinan los versos por el tono de su música, por su temblor de nervios de punta, su tiple en la hélice del oído. Y aun así, soy incapaz de hacer con la voz el sonido físico equivalente de lo que escucho en el oído interno; y la incapacidad de distinguir ese preciso conocimiento, la confianza para afirmar que existe una realidad en la poesía que es indecible y, por eso mismo, mucho más penetrante, esa capacidad y esa confianza se basan en buena medida en una lectura de Eliot."

Nota de Seamus Heaney, traducción de Ezequiel Zaidenwerg.

martes, 19 de agosto de 2014

Ricardo Carreira


El café se evapora en la taza verde.
café,  taza.
evapora.

La luz rebota contra el plato, la taza y la
mesa.
luz,  plato,  taza,  mesa.
rebota.

Tomo la taza y la cambio de lugar.
taza,  lugar.
tomo,  cambio.

Hay menos café en la taza porque está
caliente y se evaporó.
café,  taza.
hay,  evaporó.

El golpeteo de la luz la hace vibrar como una
campana.
golpeteo,  luz,  campana.
hace,  vibrar.
parece,  quieta.

Cuando la apoyo sobre la mesa, la mesa gasta a
la taza y la taza gasta a la mesa.
mesa,  taza.
apoyo,  gasta.

(…)


*


Tengo una piedra blanda y redonda en una mano.
Te pido que me dejes tomar tu mano.
Cinco más cinco dedos y las manos.
Todo lo creado por nosotros tocaron tus manos,
miles, muchas cosas.
Ahora solas tus manos y las mías, tibias
oscilando juntas, sin que se note.
Tu mano ha tocado una taza por todos sus lados
y aristas, un plato, una radio por la llave y
toda, por el pasa cassette, el enchufe, las
paredes poco, las puertas, tus zapatos, tu
corpiño, tu pollera, el peine, el perfume, y
mucho más.
Ahora están solas, tu mano y la mía, juntas,
con sombra.
Tengo una piedra de varias formas en mi mano.
Tus manos han tocado un televisor, silla, vaso,
reloj, tenedor, ladrillo, lámpara, heladera,
pañuelo, pullover.
Ahora están, tu mano y la mía tibias, juntas,
oscilando, a media sombra.

(están tibias porque están resonando como una
suave música)

no te oigo.


*


Una mujer está en el baño, desnuda, su ropa
seca está sobre el suelo mojado.
La ropa va absorbiendo poco a poco el agua.


Ricardo Carreira, Poemas, Buenos Aires, Atuel, 1996 [reedición con el agregado de una selección de prosas, apuntes y dibujos: Ricardo Carreira, Mataderos, Buenos Aires, Ediciones Stanton, 2012].


Textos rescatados por Lucas Soares en el blog MALONMALON:

domingo, 10 de agosto de 2014

Juan Pablo Bonino - Entrevista



Entrevista realizada por Diego Materyn a Juan Pablo Bonino, escritor argentino.

Juan Pablo Bonino nació en Marzo de 1984. Es licenciado en letras y trabaja como docente en escuelas secundarias.